Los futuro bachilleres que participaron en encuentro de Reto País en Maturín (Monagas) anhelan mejoras en el transporte público, en la seguridad laboral y en los presupuestos universitarios
Estudiantes de las escuelas de Fe y Alegría “Ángel de la Guarda” y “Padre Luis Ormirez”, en Maturín, estado Monagas, trabajaron en el marco del proyecto Reto País e hicieron, desde su realidad juvenil, propuestas de cara a su futuro universitario y laboral. Durante la jornada expresaron su deseo de permanecer en una Venezuela con oportunidades.
Las iniciativas de los estudiantes se centraron en la necesidad de mejorar temas como el transporte, la seguridad laboral y la mejora de los presupuestos universitarios con el fin de garantizar un adecuado servicio de comedor, becas y salarios dignos al personal docente, obrero y administrativo.
Los más de 50 jóvenes que participaron en la actividad conocieron los fundamentos del proyecto Reto País y conformaron tres mesas de trabajo en las que destacaron la importancia de asegurar espacios de participación para los jóvenes que les permitan quedarse en Venezuela.
Rosa Molinos, profesora de la escuela “Ángel de la Guarda”, resaltó la importancia de que los jóvenes que culminan su etapa de formación técnica puedan ser incluidos verdaderamente en la propuesta y en el proyecto de país que miles de venezolanos están construyendo.
“Es fundamental que se abran espacios de trabajo y participación a nuestros jóvenes. Irse del país no puede ser una opción. Venezuela necesita de nuestros jóvenes, necesita universitarios que se formen en carreras claves para la transformación del país, necesitamos médicos, ingenieros, maestros, físicos, necesitamos a todos y cada uno de nuestros jóvenes para construir esa Venezuela que soñamos”, sostuvo Molinos.
Para Prisli Díaz, estudiante de primer año de bachillerato y participante del Taller Regional de Reto País en Maturín, mientras en el país no sea corregida la inflación que golpea a las familias, y que las afecta significativamente en materia de alimentación, los jóvenes seguirán optando por trabajar en lugar de estudiar.
“Los jóvenes también somos impactados por la situación que viven nuestras familias, queremos formarnos, queremos ser útiles, pero hoy día muchos compañeros están abandonando las aulas y sus sueños por trabajar para apoyar con la alimentación en sus hogares, mi sueño es que se revierta esta situación, pues el papel de la juventud es estudiar y formarse”, manifestó Díaz.
Delia Aristimuño, estudiante de sexto año de bachillerato, planteó que corregir el problema de transporte ayudaría en gran medida a los estudiantes, pues les permitiría asistir a clases y contar con la puntual asistencia de sus profesores.
Relata Aristimuño que “este año ha sido muy difícil llegar al liceo, nos cuesta a los estudiantes y cuesta a los profesores, muchos plantean retirase, creo que hay que priorizar y dedicarse a corregir el tema del transporte en general”.
Por: Meli Carolina Espina / @melicespina
Foto: Juan Guerrero (referencial)